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¿Qué cosas hacemos mal cada día, y durante nuestra vida, debido a no comprender, o despertar, a la realidad de lo que Dios ha hecho por nosotros desde el momento en el cual fuimos justificados por Cristo? (No estamos diciendo que no somos salvos, sino que en ocasiones estamos dormidos a esta realidad). Y para los no creyentes, aun no han comprendido cómo Dios los ama y quiere salvarlos, y por eso están viviendo como “a la deriva”.

Tal vez esta ilustración nos ayude: ¿Cómo se calibra una brújula? Estas son las instrucciones del manual:

“Para calibrar la brújula, aléjese de cualquier fuente magnética (elementos metálicos), para que no haya interferencias que afecten a la medición. Es preferible no calibrar la brújula en el interior de un edificio. Coloque el reloj en posición horizontal, pues esto es muy importante. Si el producto no está en una posición perfectamente horizontal puede calibrarlo mal y obtener valores erróneos. Siga las instrucciones que vienen con el producto que indica la pantalla del reloj en el modo: Calibración, y haga girar el reloj lentamente sobre sí mismo (360° en 10 segundos como mínimo). Se necesitan varios giros para calibrarlo.” 

Volveremos a esta ilustración en unos momentos.

¿Cuál es la brújula que nos mueve diariamente, dirigiéndonos a sentir paz y gozo; a tener sabiduría para nuestras decisiones grandes y pequeñas; a resistir las tentaciones de la carne; a responder a los desafíos del matrimonio, del trabajo, de las finanzas; a comprender realmente qué es la familia de Dios, la iglesia, y a amarla como Dios la ama? Si no comprendemos la justificación por la fe, aun tendremos pensamientos y sentimientos negativos que nos lleven a hacer buenas obras para tratar de ganar la salvación. Si no comprendemos que por medio del acto del sacrifico de Jesús en la cruz, y por su resurrección, Él nos ha salvado y nos ha dado acceso al Padre, aun viviremos condicionados, manejados por el temor a la muerte, y con tendencias a la ansiedad y a la depresión. Ese temor y esas tendencias producen malas decisiones en la vida. Si no despertamos a lo que es la gracia de Dios, no nos sentiremos firmes en él, y como consecuencia, andaremos como a tientas, aceptando cualquier enseñanza falsa que intente crear un sentido de seguridad emocional, sentido que no es duradera porque depende de nuestros esfuerzos intelectuales, o de nuestros sentimientos, y por lo tanto no proviene de fe en lo que Dios ha dicho y que nosotros debemos creer sin dudar. La Biblia dice que lo que no proviene de fe es pecado, de modo que cualquier cosa que dependa de nosotros como obra o como intento para ser salvos, es pecado. Las enseñanzas falsas son “revisionistas” pues tratan de revisar -y con ello, interpretar- de una manera diferente lo declarado firmemente por Dios. Esto es un engaño del enemigo para tratar de tenernos en esclavitud mental y emocional. Fe es la confianza en lo que Dios hizo y declaró. La fe jamás es confianza en nuestros sentimientos acerca de Dios. Nuestra seguridad está basada en Dios, que no miente, y no en nuestros sentimientos. De todas maneras, lo maravilloso es que el Espíritu Santo da testimonio a nuestro espíritu de que somos Sus hijos. Esto trasciende nuestros sentimientos humanos. Entendemos que es una seguridad difícil de explicar en términos humanos, no obstante, es la seguridad o firmeza que el Espíritu Santo produce en nosotros, de tal manera que nos surge la alabanza espontánea a él, el temor reverente en todo tiempo; además de fuerzas frente a la tentación, valor en la persecución, gozo en el Espíritu, sabiduría en las decisiones, y un gran amor por la familia de Dios. De regreso a nuestra ilustración: “Para calibrar la brújula, aléjese de cualquier fuente magnética para que no haya interferencias que afecten a la medición.” Para calibrar su propia brújula espiritual y caminar hacia el destino correcto, aléjese de cualquier falsas enseñanza, para que no haya interferencias que afecten su relación con Jesucristo. “Es preferible no calibrar la brújula en el interior de un edificio”:  Es preferible no calibrar su brújula espiritual dentro de sus propias ideas acerca de la salvación, o de las malas estructuras en las que ha sido formado con respecto a la gracia de Dios. Salga de esas estructuras de una vez por todas, y su “brújula espiritual” siempre le llevará a una relación con Dios centrada en el Señor Jesucristo. “Coloque el reloj en posición horizontal. Es muy importante. Si el producto no está en una posición perfectamente horizontal puede llegar a calibrar mal y obtener valores erróneos”. Coloque “el reloj de su mente” en la posición de “continua renovación de su mente”, como dice la Biblia. Si su mente no está en la posición perfectamente alineada a la Palabra de Dios, calibrará mal su espíritu y obtendrá valores erróneos en cuanto a su identidad en Cristo, y a la seguridad de lo que él hizo por usted en la cruz y en la resurrección. Por último: “Siga las instrucciones que vienen con el producto que indica la pantalla del reloj en el modo Calibración, y haga girar el reloj lentamente sobre sí mismo (360° en 10 segundos como mínimo). Se necesitan varios giros para calibrarlo.” Amado varón: Sigue las instrucciones del Espíritu Santo que vienen como resultado de la nueva criatura que eres en Cristo delante del Padre, y haz girar el reloj de tu mente constantemente, 360 grados, en la renovación de tu entendimiento para que toda tu vida hasta que el Señor regrese, o te lleve a Su presencia, compruebes que la voluntad de Dios es agradable y perfecta. (Romanos 12:2).